El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmará el lunes una orden ejecutiva que da prioridad a las empresas y productos estadounidenses en los contratos con el gobierno federal, pese al riesgo de crispar con ello a socios comerciales como Canadá, anunciaron los responsables de la nueva administración.
El nuevo decreto, según altos funcionarios de la Casa Blanca, tiene como objetivo impulsar la producción nacional y salvar empleos industriales mediante el aumento de las inversiones en las industrias manufactureras y los trabajadores.
Las nuevas disposiciones podrían irritar, sin embargo, a aliados y socios estratégicos de Estados Unidos como Canadá o los países europeos, que ya estimaban que las disposiciones de esa legislación impedían a sus empresas acceder a ciertas licitaciones del gobierno estadounidense.
El apoyo a la industria estadounidense no es una sorpresa, era una de las promesas electorales lanzadas por Biden, quien debía seducir al electorado de base de su predecesor.
Menos de una semana después de su investidura, el mandatario demócrata continúa así desarrollando sus prioridades antes incluso de que su equipo de gobierno esté instalado.
Fuente: El Universal