Mosaico | Educación
Las vacaciones terminaron y toca regresar a la escuela.
Después de un periodo de descanso en el que fuimos más flexibles con nuestros
hijos en cuanto a las rutinas y los hábitos establecidos, es tiempo de retomar
la escolaridad y todo lo que ella implica, lo que no siempre es tarea fácil.
¿Te preguntas qué puedes hacer para ayudar a tus hijos a retomar la rutina
escolar? Toma nota de las siguientes recomendaciones.
Ajusta los horarios gradualmente
Uno de los retos más grandes de volver al colegio es tener
que adaptarse nuevamente a los horarios, tanto de irse a la cama y despertar
como de las comidas. Para hacerlo lo menos traumático posible, los expertos
aconsejan ir ajustando el tiempo de manera paulatina antes del inicio de las
clases.
En el caso de la hora de dormir, se puede empezar por ir a
la cama y despertar 20 minutos antes de lo habitual en vacaciones e ir
ampliando el margen hasta que llegue el día de inicio de clases. En cuanto a las comidas, hay que retomar el
hábito de desayunar temprano en la mañana dándoles primero alimentos ligeros e
ir gradualmente.
Estimula su capacidad cognitiva
Las vacaciones son un tiempo en el que a los niños se les
permite relajarse. Sin embargo, ahora que es tiempo de volver a la rutina
escolar, deben ir preparándose para asumir las responsabilidades y tareas que
les esperan de forma progresiva. Este proceso no tiene porqué ser aburrido para
ellos: los juegos que involucren razonamiento, la lectura o pintura son formas
divertidas de estimular su capacidad cognitiva.
Evita el ‘corre corre’ de último momento
Preparar todo lo relacionado con la vuelta a clases con
tiempo, y no dejarlo para último momento, libera el proceso de agobio y estrés.
Cada día de la semana previa tómenlo para preparar juntos los cuadernos, la
mochila, el estuche, los uniformes, etc. Organiza todo para que la noche antes
esté todo listo y no tengan esa preocupación.
Enfatiza en las cosas positivas de volver al colegio
Muchos niños se sienten motivados de volver a clases
después de un periodo de descanso, pero hay otros que solo se enfocan en los
aspectos negativos de lo que eso implica: tener que despertar temprano, menos
tiempo de juego, etc. Para crear en ellos la ilusión de la vuelta a clases
enfatiza en las cosas positivas, como que volverán a ver a sus amigos y profes,
que estrenarán útiles o que recibirán una materia nueva que parece interesante.
Entiéndelos y ayúdalos
Si bien es cierto que los niños se adaptan a los cambios
mejor que los adultos, cada niño es diferente al otro. Como padres, es
importante escucharlos y entender sus preocupaciones de cara al regreso a
clases. Hay que dejarles saber que cuentan con apoyo y que siempre se estará
ahí para, en lugar de juzgar o minimizar sus sentimientos, ayudarlos.