Internacional | Haití
La Nunciatura Apostólica en Haití alertó ayer al gobierno
sobre presuntos planes del temible líder de la banda armada “Ti
Makak”(Garrapata de Mono), Carlos Petit-Homme,
para invadir la zona de Monte Calvario en Laboule 12, en la conflictiva
zona de la parte alta de Puerto Príncipe, y los locales de esa misión
diplomática de la Santa Sede.
En medio de esas amenazas,
la oficina eclesiástica de la Iglesia Católica, que tiene rango de
embajada, remitió una correspondencia fechada del miércoles pasado al
Ministerio de Relaciones Exteriores haitiano, poniéndole al tanto sobre la
peligrosa situación.
El Nuncio Apostólico actual es el arzobispo Francisco
Escalante Molina, quien fue nombrado para el cargo por el papa Francisco el 4
de junio de 2021.
Ante las amenazas de la peligrosa banda, la misión de la
Santa Sede en Haití ha pedido a las autoridades competentes ocuparse de las
medidas necesarias para garantizar la seguridad de su personal y sus bienes.
Llamadas y mensajes
“Dadas las circunstancias actuales del país y dadas las
numerosas llamadas y mensajes recibidos respecto a esta información que ya
circula en diversas redes sociales, la Nunciatura Apostólica en Haití solicita
al Ministerio de Relaciones Exteriores y Asuntos Religiosos informar, à la
brevedad, a las autoridades competentes del Gobierno”, escribe la Nunciatura
Apostólica en su carta.
La misión diplomática invitó a las autoridades competentes
a tomar medidas, a la brevedad, para garantizar la seguridad de su personal y
de sus bienes.
Asimismo, agradeció al Ministerio de Relaciones Exteriores
y Culto “por el adecuado seguimiento que dará su solicitud”.
(Listín Diario)