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Redacción Tribuna
En un acto significativo que reunió a líderes y representantes de diversas esferas de la sociedad dominicana, el presidente Luis Abinader proclamó el lunes la importancia vital del Pacto Dominicano por el Agua 2021-2036. Enmarcado como un acuerdo nacional por la vida misma, el pacto destaca la esencia elemental del agua como recurso primordial para la existencia y el desarrollo humano.
Con una perspicaz comprensión de la urgencia de la situación, el mandatario resaltó la necesidad de acciones inmediatas, con alcance a corto, mediano y largo plazo. En su mensaje, subrayó que la sociedad en su conjunto debe asumir este compromiso en aras de salvaguardar el preciado recurso hídrico. Las palabras del presidente resonaron con el peso de la responsabilidad compartida, encapsulando la convicción de que el bienestar de la nación está estrechamente vinculado al manejo y preservación del agua.
La inversión en el agua no es simplemente una cifra; es una inversión en la vida misma de la República Dominicana. Con determinación, el presidente anunció un aumento sustancial en la inversión destinada al agua, con un compromiso financiero de alrededor de 600 millones de dólares anuales, a partir del próximo presupuesto. Esta medida refleja la firme creencia en la importancia estratégica de la gestión del agua y su influencia en todos los aspectos del país.
El Pacto Dominicano por el Agua 2021-2036 trasciende las fronteras de la política y la geografía, al involucrar a una amplia gama de sectores y entidades. Gubernamentales, académicos, empresariales y ambientales, entre otros, convergen en 38 acciones concretas. Desde la gobernanza y la gestión hasta la conservación y el cuidado, este pacto aborda cada eslabón de la cadena hídrica, con el objetivo de garantizar un futuro hídrico sostenible.
La ceremonia de firma, encabezada por el presidente Abinader, marcó un hito en la historia del país. Más de cien representantes de organizaciones e instituciones diversas estamparon sus nombres en el pacto en el imponente Salón Las Cariátides del Palacio Nacional. Este acto simbolizó la unión y la determinación de múltiples voces en la búsqueda de un objetivo común.
El presidente Luis Abinader articuló con claridad su convicción de que este pacto es una responsabilidad colectiva. Enfatizó la necesidad de eficientizar el sector hídrico y de realizar inversiones que impulsen su desarrollo, con el fin de aprovechar el recurso de manera competitiva y sostenible. No obstante, destacó que esta responsabilidad no recae únicamente en el gobierno, sino en toda la sociedad dominicana.
En consonancia con la visión de un futuro sostenible, el presidente Abinader instó a la población a participar activamente en el ahorro eficiente del agua. Con un llamado a cerrar las llaves y adoptar prácticas conscientes, el mandatario apeló a la educación como un componente clave en la preservación del recurso hídrico.
El Pacto Dominicano por el Agua 2021-2036 no surgió de la nada. Fue el resultado de exhaustivas consultas y diálogos, orquestados por el Gabinete del Agua. Estas discusiones se extendieron por las 32 provincias del territorio nacional, involucrando a más de mil personas y representantes de diversas organizaciones gubernamentales, de la sociedad civil y congresistas. Las voces diversas convergieron para identificar puntos de mejora y causas generadoras relacionadas con el agua.
La rúbrica de este pacto histórico no solo celebró un compromiso, sino que también marcó el comienzo de una transformación. Las consultas revelaron la escasez y la importancia crítica del agua en el país, y subrayaron el papel central que juegan los dominicanos en asegurar un futuro hídrico próspero. A medida que avanzamos hacia 2036, este pacto encarna la visión compartida de una nación unida en su empeño por preservar y garantizar el recurso más esencial para la vida: el agua.