.jpeg)
Nacional
La reciente visita del subsecretario adjunto de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley (INL) del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Todd D. Robinson, a la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, ha dejado cuestionamientos sobre la eficacia y profundidad de la cooperación entre ambos países en materia de seguridad.
Durante el encuentro, Raful y Robinson discutieron temas generales de cooperación, aunque no se anunciaron compromisos específicos ni proyectos concretos. A pesar de que el Ministerio de Interior presentó esta reunión como un paso positivo en materia de seguridad, muchos se preguntan si esta colaboración alcanzará resultados tangibles para la ciudadanía, especialmente considerando el aumento en delitos violentos y narcotráfico en el país.
Tras la reunión en el despacho de la ministra, la comitiva visitó el Palacio de la Policía Nacional y recorrió el Departamento II, aunque la falta de transparencia en cuanto a los avances y cambios estructurales necesarios para enfrentar la inseguridad deja dudas sobre el impacto real de estos encuentros. Los detalles ofrecidos sobre la Fuerza de Tarea Híbrida y los logros expuestos en seguridad por la procuradora general adjunta, Yeni Berenice Reynoso, parecieron más discursos sin cifras ni datos concretos que aseguren a la población una reducción en la criminalidad.
La falta de resultados palpables plantea cuestionamientos sobre la efectividad de las colaboraciones bilaterales. ¿Hasta qué punto estas reuniones impactan en la seguridad ciudadana? Sin proyectos claros y objetivos medibles, la población aún espera acciones contundentes que enfrenten la inseguridad de manera eficaz y duradera.
Fuente: El Caribe